domingo, 21 de noviembre de 2021

Carta a Selegna y "La sitja del Llop" 20-11-2021

                             

Probablemente la historia mas dura que he escrito y de la que tanto he aprendido

14 de noviembre de 2021

   Había pasado casi un año, la vida sigue era su conclusión, cada día sería el último y no se perdería ninguna oportunidad. La partida casi repentina de Selegna y la forma en que se marchó no hizo mas que reafirmarle en su forma de ser. El era así, creía que las personas no estaban preparadas para la muerte, por eso no desperdiciaba ninguna oportunidad. Así se lo explicaba a sus hijos por si algún día el óbito tocaba a su puerta, -si algún día muero espero que lloréis, pero que sea de alegría y de celebración de lo bien que lo hemos pasado, me ha dado tiempo de disfrutar todo y de dejar mi huella con vosotros, recordad que ha sido vuestra madre quien me ha acompañado en este extraordinario viaje, y ha sido ella la que ha puesto mas esfuerzo en vuestra maravillosa creación, y por favor ponedle a mi ataúd alguna que otra pegatina de esas que a mi me gustan-.

  Y otra vez empezaría a escribir, María le acaba de explicar un detalle desconocido que había sucedido días antes de la repentina partida de Selegna. 

 Él no conocía aquel detalle tan duro del día en que a Selegna le comunicaban que en breve tendría que partir.

 Al saber lo sucedido en aquellos momentos, aquel hombre decidió escribirle una carta para explicarle como había ido aquel primer año tras su partida.

   La carta decía así:

Barcelona 19-11-2021

  Selegna, ha pasado poca mas de un año desde que te tuviste que ir, estoy seguro de que con el paso del tiempo nos volveremos a ver, pero para tu tranquilidad y tu descanso infinito te escribo esta carta para que sepas como están las cosas por aquí.

  Ha sido un año raro, una mezcla de dolor y alegría, no solo porque tu te tuvieras que ir tan rápidamente y sin apenas explicaciones, además han pasado otras cosas que han ido suavizando tu marcha. 

  Es posible que aún no lo sepas, pero después de tus años de lucha por una cura para Marina, se ha encontrado un tratamiento increíble, tu hija lleva meses sin recaídas, si, ya se que no te lo crees, pero es así. Por fin se engordo esos Kgs que le faltaban y a pesar de que aún recibe cierto rechazo de una sociedad no preparada para human@s tan extraordinarios como ella, Marina se está haciendo un hueco en este mundo. Esta semana le han dicho en el instituto que no podrá terminar enfermería, no conocen a Marina, y no saben de donde viene, terminará y seguirá su camino. Se ha apuntado a un gimnasio para ponerse fuerte en lo físico, y además está muy centrada en los estudios. 

  En cuanto a tu rebelde Carlota, ya sabes como es, tiene un carácter bravo difícil de cambiar, ya se que tampoco te lo vas a creer pero ha empezado a trabajar, estoy seguro de que algún día podrá encauzar esa rebeldía y la utilizará para hacerse un hueco al igual que Marina. Así que no desesperes, ten paciencia y ya veras que las dos saldrán adelante. 

 En cuanto a tu amado Jordan, la verdad es que le está costando estar tan lejos de ti, lo va llevando como puede, cada semana voy a verle y charlamos. Con la excusa de que me invite a un café cada jueves me presento allí y conversamos un rato mientras se fuma un cigarro. Ya sabes, hablamos del trabajo que tanto le gusta, arreglamos el mundo y cotilleamos temas de familia.

 Esta semana ha sido una semana de cierto júbilo, además de lo que te he explicado, justo hoy se ha graduado Iván, seguro ya has visto todas las fotos que se han cruzado en los diferentes whatsaps familiares. 


 En cuanto a tu amiga María, mi amada, aún sigue siendo tan terca como una mula, pero ya sabes que también por eso se hace querer. Forma un equipo muy divertido con tu hija Marina y casi todos los días se pegan buenas charlas al teléfono.

 En fin, poco mas te puedo contar, ahora mismo me tengo que ir con tu hija, la cazanubes, que me está esperando con Jordan para otra se sus historias, ya sabes como es, cuando se empeña en algo embarca a todo el mundo. 

 Y por cierto mañana tengo una carrera, ya sabes que nunca dejaré de correr, cada zancada me da vida, la carrera se llama La Sitja del Llop, iré con buena compañía, mis amigos Álvaro, Javier y Roger.

Un besazo Selegna, ten paciencia, volveremos a estar juntos, volverás con tu familia.

David

Aquel hombre sabía que Selegna jamás recibiría aquella carta, pero se aferraba a creer que tal vez allí donde estuviera sentiría la onda expansiva de su alma.

Y una vez acabada la carta a Selegna, escribiría el detalle de lo que María le había contado, para no olvidarlo y seguir llevando a Selegna por bandera.

5 de noviembre de 2020

"Cógeme la mano María" fueron las únicas palabras que brotaron de su alma,  le acababan de comunicar que la enfermedad ya era imparable, le quedaban pocas semanas de vida y los médicos solo podían enviarla paliativos. María le apretaba la mano, cuyo dorso acariciaba con el dedo pulgar, y apretaba los dientes para no llorar mientras que con la otra mano, su mano débil, empuja la silla como podía. Selegna nunca perdió el humor e incluso en aquel momento y después de un profundo y cariñoso silencio, le  dijo a María, "-vaya dos, una tarada por una enfermedad incurable y una tarada a punto de morir-".

   Diez días mas tarde Selegna moría con la triste despedida de ver a su hija Marina tumbada en el sofá, como otras muchas veces, sufriendo otro horroroso ataque del trigligemio. El panorama que dejaba era desolador, ni siquiera en el día de su muerte pudo despedirse de su hija Marina con cierta dignidad, las dos tumbadas frente a frente, una luchando con las puertas de la muerte frente al dolor de ver a su hija sufriendo, y la otra soportando los dolores mas duros, el dolor del trigligemio y la inminente perdida de su madre. 

  Además en aquel momento la humanidad estaba sufriendo una de las mayores pandemias de la historia, el COVID-19 se había llevado a mas de cuatro millones de personas y las muertes no cesaban, solo en España llegaban a morir hasta mil personas al día. Toda una generación de personas en su tercera edad estaba muriendo en la mas absoluta soledad, en el mas absoluto abandono. 

  El panorama era desolador, la angustia era infinita y negro era el color.

19-11-2021

 La vida seguía, solo para Jordán había un vacío infinito.


2 comentarios:

  1. David, siguiendo tu recomendación, he leído lo que has escrito con tranquilidad, intentando visualizar lo que leía. Es una historia muy triste. Más que nada porque es real. Pero a la vez es positiva. Me ha dejado con un sentimiento positivo.
    Estoy seguro de que veré pronto a Selegna.
    Un beso David

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    1. Abel, perdona no haberte respondido antes, soy un poco desastre.....en fin que te voy contar yo de la vida que tu ya no sepas, me alegro de que este escrito te haya dejado un sentimiento positivo, no nos educan para la muerte y la muerte es algo natural, Marina, Carlota y Jordan ya sabes quienes son, que sepas que van tirando, la vida sigue, es Jordan quien lo lleva peor, la soledad es muy dura....y un abrazo Abel, cuidaros mucho

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